sábado, 9 de febrero de 2013

Insuficientes, las habilidades cognitivas: Juan Carlos Tedesco



Cuando se crean los sistemas educativos en nuestras naciones está la idea de nación que había que construirla, y ese era el sentido de la educación; luego nos fuimos por conceptos de formación de recursos humanos, por la función económica de la educación, y entró la idea de mercado donde aparece el cliente; es decir, ni ciudadano ni el recurso humano: es el consumidor.

Insuficientes, las habilidades cognitivas: Juan Carlos Tedesco
La escuela debe fortalecer el compromiso con la justicia social

Laura Poy Solano. La Jornada. 3 de febrero de 2013, p. 34

El reto que enfrenta la educación en América Latina no sólo es definir hacia dónde va, sino superar el déficit de sentido colectivo, porque la escuela no sólo debe dar habilidades cognitivas, sino fortalecer el compromiso con la justicia social, asegura Juan Carlos Tedesco, pedagogo y educador argentino.

Ante la imposición de una visión neoliberal en la educación, ésta pasó de ser un instrumento para la construcción de un proyecto de nación, a la formación de recursos humanos, y más tarde, con las ideas del mercado, a tener clientes y consumidores.

No habrá justicia social sin educación, porque para estar incluido socialmente se debe estar informado, ya sea para buscar empleo, para formarse como ciudadano o construirse como sujeto social; por eso, afirma, la educación debe también propiciar la adhesión a la justicia como principio formativo.

–De los años 90 a la fecha hay una situación de déficit de sentido colectivo. La vigencia del neoliberalismo con su idea de mercado mata el sentido o crea el sentido individual. En el mercado somos competidores. Hay ganadores y perdedores: me desrresponsabilizo del otro. El mercado crea una ruptura de la cohesión social.

Necesitamos retomar un sentido colectivo. Esta volviendo la necesidad de la justicia social, de crear sociedades más justas que las que tenemos.

Este concepto es fundamental para los educadores, porque pueden marcar un sentido en la escuela, porque cuando se crean los sistemas educativos en nuestras naciones está la idea de nación que había que construirla, y ese era el sentido de la educación; luego nos fuimos por conceptos de formación de recursos humanos, por la función económica de la educación, y entró la idea de mercado donde aparece el cliente; es decir, ni ciudadano ni el recurso humano: es el consumidor.

Las habilidades blandas en la escuela, que se refiere a lo que no es cognitivo, lo que te pueden dar para ser un buen ciudadano; pero esto no es blando, es muy duro. No se puede disociar de lo cognitivo. Hoy para ser solidario hay que tener mucha información, ademas del sentimiento y valor ético. Además de tener sentimientos hay que estar informado.

Estamos también en momento donde hay cierta crisis del saber pedagógico. Es evidente que debemos tratar de disminuir la disociación entre formación inicial de los docentes y las exigencias para el desempeño, son mundos totalmente diferentes.

Una forma de hacerlo es articular la formación inicial del maestro con el desempeño.

–Es legítimo preocuparse por los resultados, pero a veces se van desvirtuando.

“Evaluar es fundamental, pero para qué. Si el objetivo es la justicia, entonces es para saber dónde tengo que intervenir y con qué.


No hay comentarios:

Publicar un comentario